Marisol Garmendia, diputada de Movilidad y Ordenación del Territorio de la Diputación Foral de Gipuzkoa, ha estado en Lazkao esta mañana para conocer la red de bidegorris del municipio y, en particular, ha visitado las obras recién concluidas en el bidegorri destinado a peatones y ciclistas en el puente entre las calles San Ignacio y José Lasa.

La red de bidegorris de Lazkao tiene 3,5 kilómetros en total y este año se ha habilitado una red de bidegorris de unos 1,3 Km. Desde hace muchos años, la apuesta del Ayuntamiento de Lazkao es apostar por la movilidad no motorizada, dar prioridad a peatones y bicicletas.

La diputada de Movilidad y Ordenación del Territorio Marisol Garmendia ha destacado en esta visita que "la Diputación Foral de Gipuzkoa mantiene su compromiso para seguir ampliando y mejorando la red de bidegorris de Gipuzkoa, tanto la foral como la que depende de los ayuntamientos del territorio, como es este caso de Lazkao, que hemos subvencionado con cerca de 27.000 euros. De hecho de cara al próximo año 2018 redoblamos nuestros esfuerzos y multiplicamos por dos el presupuesto destinado a bidegorris municipales, pasando de 75.000 a 150.000 euros. Pero éste es un compromiso asumido desde el principio de la legislatura y que este año se ha traducido en los trabajos realizados en Eskoriatza, Anoeta y en este bidegorri de Lazkao, dónde estamos encantados de poder colaborar con esta subvención. Para el departamento de Movilidad es importante seguir completando la red de bidegorris del Goierri y estos trabajos colaboran de manera decisiva en ofrecer un salto de calidad a esta red".

Tras realizar el informe correspondiente a esta cuestión en 2005, se pusieron en marcha las obras para construir la red de bidegorris básica. Desde entonces, a lo largo de los años, han sido muchas las obras realizadas para adecuar, renovar y ensanchar o ampliar la red de bidegorris.

Además de desarrollar el eje principal que atraviesa el pueblo, se han construido los bidegorris que van a Beasain y Ordizia. En los tramos de carretera en los que ha sido imposible acondicionar espacios para construir el bidegorri separado, se han llevado a cabo intervenciones para dar prioridad a peatones y ciclistas. Así, en los puntos peligrosos para peatones y ciclistas se han habilitado pasadizos subterráneos, adoptando medidas para evitar situaciones peligrosas.
Todo ello, innegablemente, ha acarreado el aumento significativo de peatones y, sobre todo, ciclistas en el municipio. Algunas de las actuaciones llevadas a cabo, además, han acarreado la transformación fundamental del propio Lazkao. Como la de la calle Hiribarren, por ejemplo. Ya que una red peatonal y de bidegorris adecuada también ofrece calidad de vida.

El objetivo, garantizar la seguridad de peatones y ciclistas
En estos momentos, la red de bidegorris de Lazkao tiene 3,5 Km. Pero siguiendo por la vía iniciada en el pasado, en la actualidad aún son necesarias varias adecuaciones y renovaciones. De ese modo, el año pasado se ejecutaron varias obras para adecentar el suelo de varios tramos de bidegorri y, en total, se renovaron y adecentaron 0,3 Km. Este año se ha dado un paso más y se han llevado a cabo unas obras que, dado el tamaño de Lazkao, constituyen una apuesta importante para el municipio.

Se prevé realizar varias renovaciones en 1,3 Km de la red de bidegorris. Entre ellas, 0,6 Km corresponden al nuevo eje de bidegorri, dentro de las obras realizadas en el entorno de Iturgaitzaga. Junto con el pasadizo bajo la variante a Lazkaomendi, se construirá un nuevo eje de bidegorri hasta Antzalde. Otras obras destacadas han sido la renovación del eje del barrio Gurutze y las obras en el puente San Ignacio.

El Ayuntamiento de Lazkao ha recibido una subvención de 26.850,61 euros del programa del Departamento de Movilidad y Ordenación del Territorio de la Diputación Foral de Gipuzkoa para mejorar las vías pedestres y ciclistas del municipio y gracias a dicha subvención se ha podido realizar una intervención mayor de la prevista inicialmente en el puente de San Ignacio, prolongando el bidegorri hacia Agauntza y Areso.

El puente de San Ignacio era el punto más peligroso del eje principal del pueblo porque los espacios para peatones, ciclistas y vehículos no estaban convenientemente diferenciados. Pero gracias a las obras realizadas, cuenta ahora con un bidegorri de 2,20 m de anchura y aceras de 3,2 metros. Con el nuevo tramo de bidegorri, peatones y ciclistas estarán más protegidos.